Para crear el futuro de los vehículos autónomos se necesita una infraestructura de computación de alto rendimiento y eficiencia energética para la IA. La clave del éxito es optimizar la carga de datos para el entrenamiento y funcionamiento de estos vehículos sin comprometer la seguridad. Cuanta más información puedan recopilar y procesar los automóviles, más rápido y mejor podrá la IA aprender y tomar decisiones.
El escalado del centro de datos con sistemas NVIDIA® DGX™ basados en la GPU es la mejor manera de crear una infraestructura de IA que puede ofrecer vehículos autónomos y seguros a los consumidores. NVIDIA DGX-1 es un superordenador de IA que simplifica el entrenamiento y la gestión de algoritmos de deep learning. Ofrece una velocidad de entrenamiento tres veces mayor que otros sistemas con GPU y funciona desde el primer momento.
Estos sistemas líderes del sector hacen algo más que permitir el desarrollo rápido de modelos a escala. DGX se traduce en un ahorro drástico en la infraestructura de deep learning e IA, al reemplazar cientos de servidores de CPU, a la vez que es 60 veces más pequeño y 18 veces más eficiente en el consumo de energía.